CAMBIARSE D EPARTIDO Y HACER LO QUE SE LA DA SU REGALADA GANA LO HAN LLEVADO AL FRACASO.
El munícipe de San Pedro Pochutla, José Ricardez, rindió su segundo informe de gobierno, con un escaso auditorio de 300 personas, el cual resumió en un discurso de escasos 30 minutos.
El PRESI QUIERE LLORAR.
CUANDO EL PUEBLO TIENE LA RAZÓN, EL PUEBLO HACE JUSTICIA: ES LA JUSTICIA MORAL.
Una de sus aspiraciones como político era llegar a ser el elegido para la Diputación del Distrito de Pochutla, sin embargo, las evidencias en corrupción, neopotismo, mala gestión, una conducta poco seria, no le permitieron lograr dicho objetivo; ahora se encuentra solitario y sin el apoyo de sus ciudadanos que lo eligieron democráticamente.
Estratégicamente el evento se desarrolló en la cancha municipal, para que las gradas sirvieran de parapeto, habiendo solamente dos accesos, los cuales eran celosamente custodiados por policías municipales vestidos de civiles.
En las afueras de la cancha también fueron vistos varios policías municipales, vestidos de civil, quienes resguardaban el área, en espera de algún grupo de manifestantes, mientras una pipa bloqueaba el acceso al parque, frente a la iglesia de San Pedro.
Detrás del palacio municipal fue bloqueado el acceso con un volteo, mientras agentes de tránsito y policías municipales resguardaban el área.
El segundo informe de gobierno fue considerado por algunos ciudadanos como falso, “un montaje para tratar de justificar los recursos que ha recibido del gobierno estatal y federal”.
El discurso duró alrededor de 30 minutos, con fallas al momento de pronunciar las palabras por parte del presidente municipal, que en ocasiones decía una frase por otra, mientras una edecán se acercaba, al menos en cinco ocasiones, para ofrecerle un vaso de agua, quizá para aminorar la resaca del día anterior.
Se sabe que fueron invitados al menos ocho presidentes municipales de la región costera, pero solo asistieron dos, a quienes José Manuel Ricardez, un tanto nostálgico, llamó “verdaderos amigos”, el de Santa María Tonameca y el edil de Huatulco.
“Más fue la espera, de dos horas, que lo que duró el informe”, dijeron algunos alumnos del Cobao que asistieron a dicho evento, “era obligatorio, por órdenes de su maestro, ya que pasaron lista, los reprobados pasarían las materias y los demás, se les apoyaría on un punto", comentaron.
Decenas de sillas quedaron vacías, mismas que fueron levantadas, casi al concluir el evento, por órdenes del Presidente Municipal.
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