El FC Barcelona no dejó espacio para la duda gracias su gran victoria por 2-0 ante el FC Internazionale Milano, un resultado que le permite recuperar el liderato del Grupo F de la UEFA Champions League. A pesar de las ausencias de dos de sus estrellas, Lionel Messi y de Zlatan Ibrahimović, el Barça cuajó un gran encuentro y desbordó al Inter con un fútbol brillante en la gran primera parte. Los tantos de Gerard Piqué y Pedro Rodríguez acercan al Barça a los octavos de final, aunque se jugará su pase ante el FC Dynamo Kyiv en la sexta y última jornada de la fase de grupos.
Sin Messi ni Ibrahimović
Las lesiones se dejaron notar mucho en la alineación de Josep Guardiola de cara a este vital encuentro en el Grupo F de la UEFA Champions League. Conocedores del empate del FC Rubin Kazan, el Barça se presentó en el Camp Nou con la necesidad de un resultado positivo, una tarea compleja por la entidad del rival y por la ausencia en el 'once' de Messi y de Ibrahimović, por lo que Thierry Henry, Andrés Iniesta y Pedro Rodríguez formaron el improvisado tridente ofensivo. Además, en defensa la gran novedad llegó con el regreso de Eric Abidal tras su lesión. Por parte del Inter de José Mourinho, la vuelta de un Samuel Eto'o muy ovacionado a la que fue su casa las últimas cinco temporadas puso el morbo a este gran encuentro de la Liga de Campeones.
Gol de Piqué
Con la presencia de dos técnicos amantes de la táctica y del estudio del rival, los primeros compases del encuentro fueron de tanteo. El Barça pareció no notar demasiado sus bajas en la construcción del juego, aunque sí en jerarquía. El Inter, por su parte, planteó el encuentro a la contra, con Dejan Stanković de enganche ante la movilidad arriba de Eto'o y Diego Milito. El empate del Rubin Kazan, que había jugado dos horas antes, brindó al Barça una ocasión demasiado apetitosa para desperdiciarla y puso tierra de por medio con un tanto de Gerard Piqué a la salida de un saque de esquina. El centro de Xavi Hernández fue peinado al primer palo por Henry para que el internacional español, lleno de oportunismo, pusiera al Barça por delante en el 10'.
Con estilo
Y es que el mejor halago que se puede decir de este Barça es que apenas notó las ausencias de dos de sus pilares: Messi e Ibrahimović. El Barça posee un estilo de juego tan definido, con automatismos tan evidentes, que las piezas cambian sin que lo haga el rendimiento. Xavi pudo ampliar la ventaja pocos minutos después con un lanzamiento de falta que rozó el larguero de la portería de Júlio César, mientras el Inter, sin apenas circulación de balón, no fue capaz de llegar a los aledaños de la portería de Víctor Valdés.
Magistral Xavi
Si el Barça fue superior a pesar de sus ausencias, lo logró gracias al timón que da pausa y sentido al juego azulgrana: Xavi. El internacional español, soberbio, demostró su tremenda clase con un pase entre varios jugadores del Inter que supuso el segundo tanto del encuentro en el 26'. Allí, entre tanto pierna italiana y tras el pase de Xavi, apareció Alves para colocar un centro al segundo palo que fusiló al fondo de la red Pedro Rodríguez. Sobresaliente partido del joven canterano del Barça que no lo tuvo nada fácil en su enfrentamiento con Maicon, uno de los mejores laterales del mundo.
Con presión
El Inter dispuso de su mejor ocasión tras un error de Valdés que permitió a Stanković disparar a puerta con el guardameta mal colocado, aunque su disparo se fue fuera. Sólo con el pitido del árbitro señalando el descanso el Inter puso fin a la gran superioridad local en el primer tiempo. Ya tras la reanudación, el Barça continuó con esa presión que tan buen resultado le dio en los primeros 45 minutos. Este actitud permitió robos cerca del área del Inter que transformaron en ocasiones claras, como la que permitió a Xavi rematar de cabeza un centro de Alves que exigió una tremenda parada de Júlio César.
Baja el ritmo
Varias interrupciones por las constantes faltas bajaron notablemente el ritmo del partido, aunque el Barça tampoco vio peligrar su victoria. Con Eto'o y Milito desasistidos, el peligro del Inter se limitó a alguna jugada aislada o de estrategia, pero sin duda este martes no fue el día del conjunto italiano. El Barça cambió su plan los minutos finales y se dedicó a dejar pasar los minutos sin descuidar la faceta defensiva, una táctica que dio sus frutos con el pitido final de Massimo Bussaca. Con esta victoria, el Barça, fiel a su estilo, es líder del Grupo F y tendrá que rematar su faena ante el Dínamo si quiere estar en los octavos de final.
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