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miércoles, 9 de marzo de 2011

GATOPARDISMO DE LORENZO LAVARIEGA EN HUATULCO.

GATOPARDISMO DE LORENZO LAVARIEGA EN HUATULCO.

Negocios en lo oscurito, salarios de lujo para familiares.

Por Rubén Osorio.



En Huatulco, Lorenzo Lavariega ha jugado al gatopardismo , cambiar para que todo siga igual, como afirma el Libro: Oaxaca 2006, Autoritarismo, mitos y daños, por cierto lo recomiendo ampliamente para conocer los hechos desde un punto de vista crítico, veras y objetivo.

Lorenzo Lavariega en su afán de ser el Presidente Municipal de Santa María Huatulco, hizo muchas maniobras, en primera compró la plaza de presidente municipal, al extinto Diputado Federal, Guillermo Zavaleta Rojas por la suma de 10 millones de pesos, afirman miembros de Convergencia de Huatulco, para ser el candidato oficial del Partido Acción Nacional, acción por la cual, siempre se mantuvo firme de ser el ungido; nunca dejó y no ha dejado de ser priísta.

Por tal razón, mantenía fija su campaña porque el asunto estaba amarrado en lo oscurito. Hoy como edil de Huatulco juega al gatopardismo, se sumo al cambio y al progreso, pero para que todo siga igual o peor.

Administración mediocre. Sin rumbo y destino.

Ante la mediocridad de la actual administración, tomando decisiones sin delegar responsabilidades, sin aprobar democráticamente sus acuerdos, ha convencido a los 11 regidores rebeldes mediante un salario de lujo de 60 mil pesos, han dado a conocer ciudadanos huatulqueños.

En su intensa lucha por consolidar un imperio político y económico, juega al líder, sin considerar, las desventajas que genera su arrogancia. Tras no tener una postura definida al gobernar, los fuertes grupos de oposición pueden reventar en cualquier momento, gracias a las arbitrariedades cometidas en los primeros dos meses, ¿Qué pasará en este trienio?, se pregunta un ciudadano de Cerro Chino donde resolver el problema del agua es urgente.

Las sesiones de cabildo abierto al público, una teatro cómico, donde todo viene planchadito, ningún regidor protesta, todo está bien, en Huatulco no pasa nada, claro el salario está de por medio. Las demandas, en primera, hablando del tema de la inseguridad, no se han organizado operativos en conjunto con las instancias correspondientes, no se han tomado acuerdos para obtener estrategias de solución inmediata al tema, dado que a todas horas se cometen robos a casas y negocios. En segunda, no hay la eficacia del cuerpo policiaco; en tercera, no se cuenta con los elementos de seguridad necesarios y las unidades de motor.

A dos meses de gobierno municipal, Lavariega Arista ha perdido más del 70% del electorado que votó por él, en las pasadas elecciones del cuatro de julio, con las daciones tomadas por el cabildo, dejará un vacío de poder, antes de emprender la carrera por la diputación federal, sueño guajiro que promueven los operadores del Acción Nacional.

La administración es una muestra de ineptitud, soberbia y cinismo.

“En su primer informe de los primeros dos meses de trabajo, el Gobierno Municipal de Huatulco de Lorenzo Lavariega informa: se han creado más de 90 empleos para la familia del presidente, con el objetivo de guardar y defender como a un perro el erario municipal, además, toda la familia cercana o del presidente tendrán salarios de aviadores hasta por 50 mil pesos. Las obras no se licitarán por órdenes del presidente, dado que hay compromisos con los padrinos que apoyaron en la campaña, con un 20% de participación para el edil”.

En tiempos del siglo XXI, para municipios como Huatulco se requieren hombres con visión, estadistas, que tengan el control de las instituciones a su cargo, no la presión y represión, mucho menos promover la corrupción, se necesitan líderes del grupo que representen al pueblo, un buen gobernante debe ser un hombre con la sabiduría para resolver los problemas y necesidades de la población. No un arrogante y aberrante líder enfermo de poder y riquezas.

Un buen líder debe de actuar bajo perspectivas de una clara visión de la realidad, y no sobrepasar los límites de la inoperancia.

Es estilo Maquiavélico de Lorenzo Lavariega, es un ejemplo de un hombre sin estilo para gobernar, tiene la nula capacidad de poner cuidado en desarrollar una administración ejemplar, después de obtener un triunfo histórico. Nada inteligente es el hombre que gobierna el municipio más importante del Estado de Oaxaca, nada convencido en gobernar con Honestidad y Transparencia para Todos. Nada decente con su pueblo, nada culto y sin valores.

Palabras más, palabras menos, es la propuesta, cambiar de bando político, para que las cosas sigan igual en la administración del 2011 – 2013, pasará a la historia, similar a la de Vicente Fox, con más errores que aciertos, después de ser, el camino hacia la transición.



La actual administración es una muestra de ineptitud, soberbia y cinismo, el mismo electorado que apoyo a Lorenzo Lavariega está decepcionado afirman militantes, a quienes prometió una solución inmediata a sus necesidades, hoy, reclaman que sólo hay oído sordos a sus necesidades.

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